En la actualidad, ahorrar energía está siendo un auténtico problema para muchos hogares y pequeños negocios. Cómo optimizar el consumo de electricidad es algo que se ha convertido en una auténtica prioridad para la empresa.
Según la Comisión Europea las empresas podrían reducir su consumo energético alrededor de un 30 % adoptando una serie de medidas que hagan más eficaz este consumo. En caso de no poder hacerlas quizá es conveniente realizar alguna reforma.
Un mal aislamiento aumenta el consumo de energía
En efecto, existen numerosos elementos ineficientes en un local comercial que pueden evitarse con una reforma de calidad para impedir que el calor producido escape hacia el exterior. Un ejemplo de esto es una reforma de local en Alicante donde se tuvieron en cuenta estos aspectos:
– Una puerta doble situada de forma estratégica y unas ventanas que emiten con dificultad el calor al exterior son dos elementos muy a tener en cuenta y que merece la pena instalar en un local comercial para reducir hasta en un 11 % el consumo eléctrico.
– La instalación de falsos techos fabricados con aislante térmico, los cuales pueden producir hasta un 15 % de ahorro en energía. Las paredes y suelos como elementos a reformar a la hora de conseguir su total aislamiento térmico. Es una inversión no demasiado cara y se amortizará a lo largo de la vida de un negocio.
La iluminación como forma de ahorrar energía
Es posible que existan espacios demasiado iluminados que incluso puedan molestar a clientes o trabajadores. Por ello, es conveniente instalar sistemas de control de luz automático que incorporan detector de movimiento.
Si no se puede usar lo máximo posible la luz natural es conveniente instalar lámparas de bajo consumo o con leds de gran eficiencia energética como las de clase A. Además, es importante regular la intensidad de la luz dependiendo de la zona o espacio concreto a iluminar. Conviene no iluminar todo el espacio por igual.
La climatización y la calefacción como elementos de ahorro
La adecuada climatización de un local comercial puede influir en las ventas, en el sentido de que si el cliente pasa frío probablemente se irá en poco tiempo, pero algo parecido ocurrirá con un cliente que experimente un excesivo calor.
Además, los equipos funcionan peor si están muy por debajo de su nivel de eficiencia, por tanto es fundamental la instalación de termostatos o de sistemas de control que regulen adecuadamente la estancia e impidan que la energía se desaproveche, así como la renovación de aquellos aparatos que superen los diez años, pues su eficiencia energética será peor.
Otros consejos
Se debe ventilar por la mañana y desconectar los aparatos de calefacción media hora antes de cerrar el negocio. Al mismo tiempo, se recomienda que la diferencia térmica no sobrepase los diez o doce grados tanto en invierno como en verano.
Elegir una compañía eléctrica más barata es otro de los factores poco conocidos. No todas las compañías eléctricas cobran lo mismo y en el mercado existen ya compañías con grandes descuentos y ofertas.
En definitiva, con unos sencillos pasos es posible conseguir ahorrar energía, con el ahorro económico que conlleva.