El mundo poco a poco se conciencia de la necesidad cada más acuciante de cuidar nuestro medio ambiente para luchar contra el cambio climático.
Esta defensa del medio ambiente ha de comenzar desde nuestras propias casas, por ello desde hace unos años en la construcción arquitectónica son frecuentes términos como ecológico, sostenible, etc. Hoy en día todo ciudadano debería aspirar a vivir en una vivienda sostenible.
¿Qué es una vivienda sostenible?
Los datos reflejan que España el veinte por ciento de la energía total que se consume proviene de las viviendas, y que el cuarenta por ciento de dicho consumo es fruto de la calefacción.
Conseguir que nuestro hogar sea sostenible no es tan difícil como podría pensarse, tan solo hay que buscar la forma de consumir menos energía de la que se produce. Con esta simple fórmula se consiguen dos objetivos: por un lado la protección del medio ambiente, y por otro, el ahorro de energía.
Los expertos coinciden en que siguiendo ciertas pautas bioclimáticas en la construcción de las viviendas se puede conseguir entre el sesenta y el ochenta por ciento de ahorro de energía. Estas pautas se reducen a tres reglas: reducir, reutilizar y reciclar.
¿Qué hay que tener en cuenta para la sostenibilidad de la vivienda?
1. La orientación es fundamental. Desde la antigüedad este siempre ha sido un factor a tener muy en cuenta a la hora de construir una vivienda, aunque en los últimos años no se le ha hecho demasiado caso. Es algo tan simple como construir teniendo en cuenta el movimiento del sol, aprovechándolo durante el invierno y protegiéndose de él en verano. Por eso la orientación sur es la idónea.
2. Un buen aislamiento es imprescindible, y para ello existen aislantes especiales para las paredes y el uso de ventanas con doble acristalamiento y juntas bien selladas optimizarán al máximo la energía del hogar.
3. El uso de las energías renovables. Incorporar a la vivienda recursos como paneles solares o sistemas aerotérmicos permitirán que la energía de nuestra vivienda sea limpia y más segura. Añadir además un sistema de tratamiento del agua, aprovechando el agua residual y el de lluvia permitirá un mayor ahorro.
4. Dotar a la vivienda de sistemas de bajo consumo, como el aprovechamiento de la luz del sol, el uso de bombillas y electrodomésticos de bajo consumo y calderas de condensación.
Las viviendas más recientes se han construido siguiendo estas pautas, pero ¿qué pasa con las viviendas antiguas? En España hay aproximadamente 12 millones de viviendas que no tienen ningún tipo de aislamiento ni han sido reformadas para conseguir hacerlas sostenibles.
Una solución óptima para la sostenibilidad
Existen empresas que consiguen hacer de los hogares un lugar sostenible energéticamente con unas cuantas reformas que no suponen un gasto excesivo.
Es fácil hacer una reforma de calidad en la vivienda cuando se cuenta con profesionales experimentados que ponen al servicio del cliente todos sus recursos y conocimientos para lograr el sostenimiento energético de un hogar.
Para una buena reforma en Alicante hay que contar con nuestra experiencia y profesionalidad en este sector: haremos del hogar una vivienda sostenible al cien por cien.