Llevar con éxito el negocio de un restaurante o bar implica muchas más tareas que las directamente relacionadas con la restauración. Es muy importante conocer bien el potencial y las limitaciones de la estructura de nuestro edificio, mobiliario y maquinaria. Por lo tanto, es muy común que de vez en cuando se requiera realizar una inversión en decoración, y llevar a cabo una redistribución de los diferentes elementos que conforman este negocio. En algunas ocasiones lo que se requiere es una renovación más en profundidad que signifique un punto y aparte en el negocio, incluso un nuevo comienzo. En las reformas en restaurantes las decisiones a tomar pueden ser complejas y suelen necesitar del asesoramiento de profesionales experimentados en reformas de bares y restaurantes.
Reformas en restaurantes: una inversión en futuro
Las reformas de los restaurantes, incluso las que no son complicadas, suelen obligar a suspender temporalmente la actividad del negocio, siendo esta una de las principales razones por las que se tiende a aplazar y evitar esta resolución. Sin embargo, en muchas ocasiones es necesario llevar a cabo una reforma; bien porque el negocio necesita un impulso o porque la aparición de nuevas normativas y circunstancias así lo demandan.
Por un lado, es bueno ver este tipo de acciones como una gran oportunidad. Por otro es inevitable verse un poco abrumado ante la cantidad de decisiones que hay que tomar. La reforma y la redecoración de un restaurante resultan una inversión que tendrá un efecto muy importante en nuestro negocio a medio y largo plazo; realizar esta operación de la mano de profesionales con experiencia implica maximizar las posibilidades de que esta inversión sea positiva y retorne pronto con los ingresos económicos obtenidos.
Algunos consejos a tener en cuenta para reformar un restaurante
Más allá de las obras de gran calado, que generalmente dejaremos en manos de una empresa de construcción experta, como Zar Obras y Servicios, hay una serie de detalles de relevancia que no debemos desatender a la hora de plantear nuestra reforma.
Mucha atención a los colores y la estética
Los colores dominantes en el local deben elegirse teniendo en cuenta la imagen que queremos proyectar y de acuerdo con el tipo de cliente que esperamos. Deben estar además de acuerdo con toda la idea corporativa del restaurante y ayudar a diferenciarnos del resto. No será necesario recordar la alta competencia existente en un tipo de negocio al alza como el de la restauración. Una imagen diferenciada significa mejorar la rentabilidad por el simple hecho de ser nosotros mismos y no cualquiera de los competidores. Por esta razón, una reforma es una gran oportunidad para darle una estética especial y diferente a nuestro negocio.
Distribuir los espacios y diferenciarlos
Es uno de los recursos más clásicos en los restaurantes. Muchos ofrecen dos áreas diferentes: una de bar y cafetería y otra zona propiamente de restaurante. Esta opción sigue funcionando a pesar de ser muy habitual, y resulta muy adecuada para locales grandes. Pero si no tenemos este espacio extra podemos conseguir ambientes diferenciados con algo tan simple como insonorizar el comedor y plantear iluminaciones y decorados diferenciados a cada zona.
Pensar en las necesidades de almacenamiento
La estética es importante, pero un restaurante tiene que ser funcional y atender a una serie ineludible de necesidades logísticas. ¿Planeamos recibir muchas entregas pequeñas durante la semana o se comprará en grandes cantidades para ahorrar? ¿Nuestro distribuidor permitirá comprar a granel y guardar en el almacén sin una tarifa adicional? ¿Tendremos un inventario de alto valor que necesita medidas de seguridad especiales? El almacenamiento es un ejemplo de consideraciones de diseño operativo y funcional que generalmente no se tratan con un simple plan de diseño de interiores. Y en especial si pensamos en la necesidad de espacios refrigerados para productos perecederos o congelados.
La importancia de la iluminación en reformas de bares y restaurantes
Pensemos en esas luces fluorescentes parpadeantes sobre una cuadrícula de cubículos de oficina: no es un lugar donde queramos estar. Por razones que no se explican fácilmente, la iluminación cautiva estados de ánimo y nos induce a valorar mejor, de un modo inconsciente, unos ambientes que otros. Las velas son románticas, todo el mundo lo sabe, y una iluminación baja nos puede relajar; pero el personal necesita iluminación adecuada para realizar sus tareas. La iluminación es un área de diseño altamente especializada porque debe superar efectos que pueden entrar en contradicción, como el que hemos descrito. Un restaurante sin un plan de iluminación bien concebido es como una buena comida sin sazonar.
Atención a la ventilación
La ventilación es más que los olores que no queremos oler, aunque el aroma de los alimentos recién hechos sea una parte importante de nuestro negocio. Por ejemplo, imaginemos un restaurante concebido en un lugar caluroso del sur, pero construido en una zona lluviosa del norte; debemos adoptar un enfoque completamente diferente en función de las fluctuaciones estacionales de temperatura. Los grandes espacios pueden generar corrientes de aire ligeras y refrescantes, pero uno pequeño y bien ventilado puede darnos esa misma sensación. La ventilación es una consideración importante en el diseño de restaurantes y solo otro ejemplo de por qué el diseño es mucho más que una buena estética.