Un jardín apacible y relajante no tiene necesariamente que ocupar una gran extensión de terreno. Los jardines pequeños, las terrazas y los patios pueden requerir un poco más de reflexión que los espacios más grandes, pero incluso la parcela más pequeña se puede transformar en un elegante refugio al aire libre. Si buscas inspiración para reformar o darle nueva vida a un pequeño jardín en este post de Zar Obras y Servicios encontrarás varias ideas útiles.
Aprovechar las ventajas de los jardines pequeños
Los jardines pequeños tienen también sus ventajas: la principal es que requieren un mantenimiento maravillosamente bajo. También son espacios idóneos para ser creativos, ya que incluso las aportaciones más pequeñas, desde mobiliario con cojines coloridos hasta la iluminación oportuna del jardín, tendrán un efecto importante y elegante. Independientemente de que estemos buscando crear un elegante jardín con balcón, simplemente queramos sacarle el máximo partido a algunos muebles de jardín o deseemos disfrutar estando rodeados de vegetación, encontraremos buenas ideas que nos inspiren. Y si estamos trabajando con un presupuesto ajustado, hay muchas opciones que se ajustan a todo tipo de presupuestos que pueden probarse sin gastar más de lo previsto.
Ideas para hacer grandes los jardines pequeños
Agregar nuevos niveles
Podemos aumentar el espacio y el interés de un pequeño jardín agregando diferentes niveles. Esto puede hacerse con un área de terraza hundida y un césped elevado, creando una sensación de volumen amplio y ganando zonas diferenciadas con interés. Las repisas y los pasos ayudarán a abrir el abanico de opciones sobre cómo podemos usar el espacio, consiguiendo zonas adicionales para que las macetas se organicen o los invitados se sienten.
Ser creativo con estantes y colgaderos
Los estantes y colgaderos no son solo para el interior. Podemos ganar espacio en el suelo con estantes para colocar macetas y objetos decorativos en una pared o en una cerca existente. Un riel de clavijas reciclado puede convertirse en el lugar perfecto para colgar la iluminación exterior.
Pensar en vertical
Podemos inspirarnos en los clásicos elementos de una pared viva, usando y aprovechando el espacio vertical de la pared para optimizar al máximo todas las superficies disponibles. Simplemente añadiendo paneles de cerca horizontales podemos convertir el lateral de un cobertizo en una significativa pared decorativa.
Este sistema puede funcionar también en tramos de valla o en paredes desnudas, o incluso en el costado de un balcón. Cualquiera de estos conocidos y muchas veces desapercibidos pequeños espacios al aire libre, pueden transformarse en un vistoso jardín vertical para macetas y plantas pequeñas.
Establecer espacios diferenciados
Disponer de un espacio limitado no significa que no podamos darle una serie de utilidades que lo llenen de significado. Si queremos disfrutar en el buen tiempo de una cena al aire libre basta con una mesa de comedor tamaño medio situada en una zona diferenciada del resto del jardín.
Podemos crear una sensación espaciosa dividiendo en zonas concretas el jardín. Una alfombra puede definir un área de descanso y distribuir los muebles necesarios para el comedor a partir de este punto de referencia.
Los colores elegidos y la pintura de las zonas verticales o los techos pueden contribuir a la sensación de espacio y de altura sobre nuestras cabezas. Usando dos tonalidades armoniosas de color podemos separar visualmente el espacio y darle sensación de extensión. Los tonos ligeramente oscuros suelen crear un efecto llamativo aportando volumen y contraste suave con el verde natural de la vegetación.
Si necesitamos asientos extra para posibles invitados, unos cojines de piso del tamaño apropiado pueden ser una solución sencilla y eficaz. Los cojines no ocupan un espacio permanente como las sillas de jardín y son fáciles de apilar y almacenar, incluso de forma decorativa, cuando no vamos a usarlos.
Combinar mini invernaderos con un muro viviente
Incluso el espacio exterior más modesto puede incluir un invernadero para el cultivo de plantas. No necesitamos un mueble caro y especializado si escogemos bien las plantas a cultivar. Podemos colocarlo contra una pared en un lugar soleado al aire libre y cuidarlo sin demasiado esfuerzo.
Si lo combinamos con paredes vivas o verdes, ayudaremos a esa sensación de variedad y diferenciación que aumenta la percepción del espacio. Estas plantaciones pueden conseguir texturas muy atractivas y hacen un gran uso del espacio limitado. Para crear estos jardines verticales, las plantas arraigan en una estructura que está unida a una pared.
Se puede utilizar una gama de plantas perennes herbáceas, arbustos pequeños, e incluso frutas y verduras. Es una gran idea incluir plantas perfumadas, flores de temporada y bulbos. Si pedimos consejo a profesionales conseguiremos una zona muy vistosa, con plantas que se adapten al aspecto y al microclima de la pared en la que se cultivarán.
Planificar las acciones para conseguir un jardín que hable de nuestros gustos
Si hay poco espacio, debemos asegurarnos de aprovechar bien y de forma racional el que tenemos. No necesitamos copiar un jardín de revista de interiorismo sin más; necesitamos un jardín que nos resulte acogedor y responda a lo que realmente nosotros buscamos en ese espacio. Para eso es importante planificar con detalle lo que queremos lograr y dejarnos asesorar por expertos.